Las dietas, el control del peso, el miedo a engordar, querer ser delgado, son actitudes muy enraizadas en nuestra cultura. La sociedad nos da el mensaje del triunfo y la aceptación unido a la delgadez. Según datos de la fundación Fita y la asociación española para el estudio de trastornos (AETCA), en España hay alrededor de 400.000 personas afectadas por un trastorno de la conducta alimentaria (TCA) siendo 300.000 adolescentes de los dos sexos de entre 12 a 24 años de edad.

El 70 % de los adolescentes no se siente a gusto con su cuerpo y seis de cada diez chicas creen que serían más felices si estuvieran más delgadas. La adolescencia es una etapa vital de grandes cambios, de crisis emocional y físico por la entrada en la pubertad, pero también a nivel psicológico se da un desajuste. “De ahí que haya que tener un cuidado especial ante la posible aparición de síntomas que nos indiquen un trastorno alimentario” nos indica Patricia Ruiz, Directora asistencial del centro Citema.

Sin Embargo, como lo demuestran las cifras y nos cuenta Patricia Ruiz, un TCA se puede dar en cualquier etapa psicoevolutiva, a cualquier edad. “Un adulto se puede ver sometido a una crisis, a estrés importante que le produce un cambio y si ha desarrollado anteriormente factores de riesgo como puede ser las dietas insanas, hace que pueda desarrollar un TCA”

Los trastornos de conducta alimentaria más conocidos en la sociedad son la anorexia y bulimia nerviosa, producidos más en las etapas adolescentes y en adultos jóvenes, pero hay otros cuadros y otra entidad que en los últimos años se está presentando en mayor medida, es el llamado trastorno por atracón. Nos comenta la psicóloga Ruiz. En base a los estudios de los últimos 10 años, el 40 por cierto de la obesidad en España es debida a un trastorno por atracón. Tanto es así, que en la última clasificación diagnostica del DSM5 ya viene como entidad diferenciada.

Comer grandes cantidades de comida, con la sensación de no poder parar, comer muy rápido sin sentirnos saciados. Incluso llegar a comer a escondidas, y luego sentirnos culpables y vergüenza. Estos son algunos de los síntomas que pueden darse en este trastorno alimenticio.

En Citema, presentan un equipo multidisciplinar, algo fundamental para superar un TCA, abordando la problemática desde varias áreas que facilitan un trabajo integral. La psicoterapia, el ámbito de la psiquiatría, el nutricionista y endocrino, junto con las terapias individuales y grupales, siempre con el apoyo de la familia, vital para la recuperación de un trastorno de la conducta alimentaria.